En San Luis de Buenos Aires se realizó la actividad para esas familias pastorales, en donde reinó un espíritu de alegría, tanto en los niños como en los mismos pastores, quienes compartieron juegos y risas en una actividad llevada a cabo para darles cariño y amor a estos ciervos del Señor.
Luego el equipo se trasladó a Cabagra, una comunidad en una reserva indígena, para llevar una fiesta navideña a 200 niños. Allí opera una iglesia alegre, en cuyo culto del sábado estuvimos y fuimos testigos del gozo de alabar al Señor, un culto que se prolongó por poco más de 3 horas, lleno de cantos, presentaciones especiales y de la Palabra del Señor.
Para el domingo en la mañana, ya a las 9:00 am. que era la hora prevista para la actividad que se había anunciado previamente, estaba llena la iglesia de niños y niñas ansiosos por recibir los regalos que se llevaban. Hubo casos en los que estos niños habían salido de sus ranchos tres o cuatro horas antes, para poder estar a tiempo en esa mañana, llena de expectativas para ellos.
Al calor de los cantos, las risas y los juegos, se llevó a cabo la actividad, llevando alegría a 200 niños indígenas, y a sus padres, quienes vivieron la alegría de sus hijos al recibir los regalitos que con tanto amor fueron enviados desde Alajuela.
Verdaderamente GRACIAS, porque es por el amor que tuvieron muchos hermanos y algunas empresas, que ha sido posible realizar una vez más este sueño de navidad para los niños y niñas de las iglesias de Buenos Aires.
El día 19 de diciembre se enviaron alrededor de otros 1,000 regalos con confites y galletas para el resto de las iglesias de la zona, para que también tuvieran su actividad navideña. Cada pastor de cada una de esas iglesias se encargaba de realizar la actividad, ya que el equipo de Extendiendo la Mano al Indígena no puede dar abasto para realizar todas las actividades en todas las iglesias.
Para mediados de enero 2009 se realizará la Escuelita Bíblica de Verano en la comunidad de Cabagra, donde nuevamente este ministerio hará viaje para llevar enseñanza a los niños, las niñas, los jóvenes y las jovencitas de la zona, y de paso, se aprovecha la visita de los padres que llevan a los niños para impartirles también la palabra, por lo que les solicitamos su oración para que el Señor supla todo lo necesario y para que esta labor esté de acuerdo a su voluntad, a quien damos las gracias, porque es quien hace posible todo esto. GRACIAS SEÑOR NUESTRO.
“Cuando haya en medio de ti menesteroso de alguno de tus hermanos en alguna de tus ciudades, en la tierra que Jehová tu Dios te da, no endurecerás tu corazón, ni cerrarás tu mano contra tu hermano pobre”. Prov.31:20
VERDADERAMENTE GRACIAS PUEBLO DE DIOS, porque no endureciste el corazón ni cerraste la mano a los hermanos indígenas.